La Junta de Andalucía ha dado un nuevo paso en su estrategia de facilitar el acceso a la vivienda con el impulso a la construcción de más de 1.200 nuevos inmuebles destinados al alquiler a precios asequibles. A través de una convocatoria de ayudas gestionada por la Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, se destinarán 38,3 millones de euros para la ejecución de 17 promociones residenciales repartidas en cinco provincias andaluzas: Córdoba, Granada, Huelva, Málaga y Sevilla.
La medida, enmarcada en el Programa de Fomento del Parque de Vivienda en Alquiler (FPA 2025), busca fomentar la colaboración con promotores públicos y privados. El impacto económico previsto de esta iniciativa es notable, ya que se estima que la inversión total asociada a estas actuaciones superará los 156 millones de euros, generando así un efecto multiplicador en el tejido económico andaluz.
La convocatoria se tramita mediante concurrencia no competitiva, lo que permite agilizar los procesos de adjudicación. Entre los municipios incluidos en esta fase se encuentran Aguilar de la Frontera (Córdoba), Cúllar y Almuñécar (Granada), Huelva y Punta Umbría (Huelva), Málaga capital, Sevilla, Martín de la Jara y Dos Hermanas.
Los acuerdos de colaboración ya han sido firmados entre la Junta, el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, y los promotores implicados. Solo resta la publicación oficial de la convocatoria en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) para completar el proceso administrativo.
El programa contempla dos líneas principales de actuación. La primera está dirigida a la creación de viviendas protegidas en alquiler para colectivos vulnerables, como personas mayores o con discapacidad. Estas promociones deberán contar con instalaciones y servicios específicos, incluyendo atención médica básica las 24 horas, limpieza, seguridad, restauración, actividades de ocio y programas de rehabilitación.
La segunda línea promueve soluciones habitacionales innovadoras como alojamientos temporales, viviendas colaborativas (cohousing) o modelos intergeneracionales. Estas alternativas también deberán incorporar zonas comunes que fomenten la convivencia y la integración social.
Esta iniciativa forma parte del Plan Vive en Andalucía y se complementa con los fondos del Plan Estatal de Vivienda 2022-2025. Todas las viviendas resultantes estarán calificadas como protegidas y estarán sujetas a un régimen de alquiler o cesión de uso durante un mínimo de 20 años.
Las nuevas viviendas podrán proceder tanto de obra nueva como de rehabilitación de inmuebles ya existentes, siempre que cumplan una superficie útil máxima de 90 metros cuadrados —excepto en los casos adaptados para personas con movilidad reducida—. Además, será obligatorio que cumplan con una calificación energética A, tanto en emisiones de CO₂ como en consumo de energía primaria no renovable.